Ahora que estamos en periodo de confinamiento por el COVID-19, disponemos de mucho más tiempo para cuidar de nosotros mismos y llevar a cabo todas esas cosas que siempre dejamos atrás por llevar un ritmo frenético de vida. Pues bien, ya es hora de ponerse las pilas y darle al cabello el cuidado que se merece para que luzca sano y saludable.
Independientemente de la textura, el color o el estilo, a todos nos gusta que el cabello tenga brillo y parezca que haya pasado por las manos de un profesional todas las semanas.
Desde Redenhair, revelamos los consejos clave para practicar desde casa, detallados por expertos en belleza, con el fin de que el cabello luzca su forma más fuerte y saludable.
Reconsidera la forma en que te lavas el cabello
Los expertos de la industria de belleza argumentan que lavarse el cabello con menor frecuencia es clave para mantener su brillo y fuerza. El lavado excesivo puede ser perjudicial para el cabello, especialmente si está decolorado, teñido, si ha sido tratado químicamente o si es naturalmente muy seco o poroso. Al lavarte el cabello todos los días, eliminas los aceites y proteínas naturales que necesitas para mantener el cuero cabelludo saludable.
Limitar el lavado capilar a tres veces por semana es un consejo clave y muy recomendado por los estilistas. Esta frecuencia, depende también del tipo de cabello que tengas: cuanto más rizado sea tu cabello, más tiempo podrás pasar entre lavados.
Debes escoger un champú que te hidrate el cabello a la vez que limpie, como el CHAMPÚ REGENERADOR, que no contiene sulfatos, por lo que no elimina el color capilar ni es agresivo para el cuero cabelludo.
Asimismo, si eres propenso al cabello graso, puedes utilizar un poco de champú en seco entre lavados para absorber el exceso de aceite. Sin embargo, debes tratar de evitar volverte dependiente, ya que puede acumularse en el cuero cabelludo y obstruir los folículos capilares, lo que puede impedir el crecimiento del cabello.
Si realmente tienes dificultades para evitar lavarte con menos frecuencia, recuerda que ciertos estilos funcionan y se ven mejor en el cabello que no se ha lavado recientemente. Las trenzas, los moños y las coletas altas son peinados excelentes para esos días de lavado intermedio.
Siempre protege tu cabello
Para muchos, las herramientas térmicas son tan esenciales para su rutina capilar como puede serlo un champú. Pero cuando se utilizan con demasiada frecuencia y a temperaturas demasiado elevadas, pueden afectar gravemente a la salud capilar.
El cabello puede dañarse tanto con herramientas que utilizan UV como con calor que producen las planchas alisadoras de pelo, rizadores e incluso secadores de pelo, por lo que es crucial darle a tu cabello la mayor protección posible.
Cuando te seques el cabello en casa, usa siempre un protector capilar térmico, a poder ser, libre de siliconas. Este tipo de productos previenen las puntas abiertas y reducen su rotura, dejando el pelo con un aspecto saludable y suave desde la raíz.
Invierte en buenos productos y herramientas
Piensa en tu cabello como con tu piel: lo que le apliques le afectará. Invertir en productos y herramientas de buena calidad hará que el cabello se vea y se sienta saludable y fuerte.
Existen numerosas clases de cepillos que ayudan a mantener y lucir la melena, porque también un buen cepillado es clave para conseguir más brillo del cabello suelto. Un ejemplo es el CEPILLO REGENERADOR CAPILAR, un producto que frena la caída de cabello y estimula el desarrollo de los folículos pilosos con un masaje en el cuero cabelludo mediante luz infrarroja, acompañada de una microvibración, pudiéndole introducir el producto que se desee para dosificarlo lentamente.
Asimismo, en el mercado hay herramientas de alisado muy mejoradas (ionizadas, de cerámica,…) que dañan mucho menos el cabello. Del mismo modo, debes invertir en un secador de pelo de buena calidad, que no queme tu pelo y que tenga la opción de aire frío para no generar el efecto frizz.
Vale la pena pagar un poco más por buenos productos y, aunque podrían tener un precio más elevado que otros, si los cuidas adecuadamente, pueden durar mucho tiempo.
Mantén tus herramientas limpias y libres de cabellos muertos, aceite y acumulación de productos lavándolos en una mezcla de bicarbonato de sodio y agua tibia al menos una vez al mes.
Acondiciona tu cabello correctamente
Un buen acondicionador también es crucial cuando se trata de cualquier tipo de cabello, pero particularmente de mechones gruesos y rizados.
El acondicionamiento profundo implica el uso de un acondicionador que agrega humedad y fuerza (proteína) al cabello. Para optimizar su uso, debes introducir calor con el acondicionador aplicado y dejarlo reposar. Puedes hacerlo cubriendo el cabello con una gorra de plástico y aplicando calor desde el exterior con un secador de pelo.
Para asegurarte de que tu cabello realmente absorba el acondicionador, puedes secarlo con una toalla después del champú. El exceso de agua puede hacer que el acondicionador no penetre en el tallo del cabello y entregue la humedad necesaria para mantenerlo sano y brillante. Si tienes poco tiempo, al menos exprime el exceso de agua.
Utiliza un acondicionador que no solo contenga ingredientes para el desenredado sino que también aporte una dosis de humedad y vitalidad al cabello, como el ACONDICIONADOR PRO-REGENERATIVO, un producto ideal para cualquier tipo de pelo. Su potente fórmula hidrata, fortalece, estimula, acondiciona y da brillo al cabello, lo que evita la rotura y deja el pelo sano protegiéndolo de futuros daños.
Mejora tu técnica de cepillado
Nadie quiere una melena enredada y enmarañada, por lo que siempre es necesario cepillarse, pero es importante hacerlo con consciencia. Si eres demasiado agresivo al peinarte, solo causarás daños como el aumento de puntas abiertas y el encrespamiento del cabello.
Para un cabello perfectamente brillante, sano y desenredado, debes cepillarte el pelo dos veces al día: una vez por la mañana y otra vez antes de acostarte, durante aproximadamente un minuto cada vez.
Debes cepillarte siempre empezando por abajo y hacia arriba, especialmente si tienes el cabello largo. Las herramientas que emplees deberían cambiar cuando tu cabello está mojado para evitar roturas porque, en esas circunstancias, es más débil y frágil. Guarda el cepillo para cuando tu cabello esté seco e invierte en un peine de dientes anchos, diseñados para deslizarse a través del cabello mojado - especialmente si es grueso, ondulado o rizado - con mucha más facilidad que el cepillo.
Reconsidera tu dieta
Introducir pequeños cambios en tu dieta te ayudará, sin duda, a que tu cabello crezca con más fuerza y brillo. En este caso, los resultados no se verán al instante sino a medio-largo plazo, pero llevar a cabo esta medida es una de las soluciones más efectivas que puedas realizar.
Te recomendamos alimentos ricos en vitamina A, B y C, ácido fólico y minerales como el zinc, el cobre y el hierro.
Una forma de asegurar estos nutrientes en el organismo es mediante suplementos nutricionales como el HAIR NUTRITION SUPPLEMENT, un producto muy completo que contiene numerosas vitaminas, minerales, extractos vegetales y factores de crecimiento que estimulan el desarrollo capilar con brillo y fuerza, a la vez que evitan la pérdida de volumen.
Mejora tu arsenal de cuidado capilar
Si tienes el cabello fino
Las personas con cabello fino deben tener cuidado cuando se trata de algo que contenga aceites grasos (como aceite de argán, coco u oliva). Si bien son muy hidratantes, estos ingredientes pueden ser excesivos para los cabellos finos y producir que nuestra melena se vuelva pesada, plana y lacia. El aceite de aloe vera es una excelente alternativa, ya que es mucho más ligero y nutritivo, sin dejar el cabello con aspecto o sensación de grasa.
Si tienes el cabello grueso
El cabello más grueso necesita más hidratación que el cabello de textura fina debido a su diámetro más ancho. Vale la pena invertir en productos que equilibren la humedad para satisfacer las necesidades de los extremos más secos y las raíces más nuevas. Si encuentras que tu cabello es propenso a encresparse, elije productos livianos de alisado que domestiquen y no pesen a tu estilo. Si tu cabello es ondulado o rizado, es posible que necesites una crema o sérum más pesado.
Date un capricho a ti y a tu cabello desde tu hogar en este periodo de cuarentena con los consejos comentados. No solo aportarás vida al cabello triste al instante, sino que también infundirás proteínas en las hebras y restaurarás la elasticidad capilar para reconstruir su fuerza de adentro hacia afuera.
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